Un Visitante Inesperado
¡Sorpresa en Jaén! Los castores han regresado al Guadalquivir después de haber desaparecido de la Península Ibérica hace siglos.
Pero, ¿cómo llegaron aquí?
Todo apunta a un misterioso «bombardeo» de castores, una práctica irregular llevada a cabo por algunos grupos animalistas que buscan reintroducir a estos roedores en su hábitat natural.
El ‘Bombardeo’ de Castores
El término «beaver bombing» describe la acción de soltar castores en un área sin los permisos adecuados ni estudios de impacto ambiental.
En Jaén, las huellas y los árboles roídos en las orillas del Guadalquivir revelaron la presencia de estos animales.
Según los expertos, es poco probable que los castores hayan llegado naturalmente, ya que la zona está a 365 kilómetros de su área de distribución conocida en España, en el Ebro y el Tormes .
¿Es Bueno o Malo?
La llegada de los castores ha generado opiniones divididas.
Algunos científicos, como Jacinto Román de la Estación Biológica de Doñana, critican la falta de controles sanitarios y el riesgo de enfermedades .
Otros creen que los castores, conocidos como «ingenieros de los ecosistemas», podrían beneficiar al entorno al crear hábitats para otras especies .
Es como si la naturaleza nos estuviera dando una sorpresa. Sin embargo, también es importante asegurarse de que estos animales no causen problemas a otras especies o al medio ambiente.
Y ahora, queridos lectores, ¡queremos saber qué piensan ustedes! ¿Creen que los castores deberían quedarse en el Guadalquivir? ¿O deberían ser trasladados a otro lugar?
¡Dejen sus comentarios y compartan sus ideas!
Con un enfoque adecuado, podríamos encontrar un equilibrio que beneficie tanto a los castores como al ecosistema local.
Fuentes: