Cazorla guarda los pinos más viejos de España.
En los altos del Pico Cabaña y Puertollano hay varios ejemplares nacidos hace más de mil años y que aún producen piñas.
A unos 150 kilómetros de la metrópoli cordobesa, en uno de los picos de la Sierra de Cazorla, varias piñas cayeron al suelo y algunos piñones agarraron y se convirtieron en árboles.
De Odón y San Enrique solo historiadores y devotos pueden hablar. Y Medina Azahara son hoy ruinas turísticas. Pero aquellos pinos siguen vivos.
Son magníficos árboles de más de mil años.
Maravillas que han resistido al paso del tiempo hasta convertirse en algo excepcional: los pinos más viejos de la Península Ibérica de los que hay evidencia científica.